Hace ya mas de un mes llegue de India y estaba des atrasándome de trabajo, oficina, pacientes; y tomando un respiro para poder con calma sentarme y plasmar en unas hojas esta maravillosa experiencia vivida: un viaje lleno de propósito, lleno de nuevas experiencias, todas enriquecedoras y maravillosas.
Les iré contando en varias etapas y según varios eventos vividos en el recorrido para que la lectura no sea muy larga y no se me vayan a aburrir.
Lo primero que tengo que decir es que INDIA es en la mayoría de opiniones de amores o des amores, no hay términos medios. La gente la queda amando o dice que quedó chuleada y que nunca volverán. Al menos eso dicen los que la visitaron y conocieron de alguna manera pues hay otros que desde siempre saben que no han ido y que no irán.
En mi caso, quedé enamorada de la India. Era un sueño conocer esa cultura y ese sueño se cumplió en parte, porque otra parte quedó en veremos y con ganas de vivirla más a fondo, mas profundamente, más cercanamente.
La India, en mi corta definición, es una CAÓTICA BELLEZA. Hay demasiada gente, hay demasiados carros, demasiados animales sueltos. La gente lo primero que me preguntó es ¿como me había parecido la pobreza? Sin embargo, quiero contarles hoy que, aunque hay pobreza y es un país que ha estado invadido por varios imperios por muchísimos años, apenas hace un poco mas de 70 años es dueño de su propia riqueza. Son fuertes en informática y en desarrollo tecnológico a todo nivel. Nuestro guía, llamado Vipin, un ser maravilloso y profundo, nos comentaba que en febrero de 2017 la India lanzó al espacio en un solo cohete 104 satélites. En este momento la India cuenta con uno de los programas espaciales más grandes y exitosos del mundo. Tiene un desarrollo agrícola impresionante. Para resumir, la India es uno de los mayores exportadores de personal altamente calificado para el sector financiero y la ingeniería de Software. Sectores como la farmacéutica, biotecnología, nanotecnología, telecomunicaciones, aviación, construcción naval y turismo han experimentado en estos últimos años un desarrollo bastante importante. Así que, ¡imagínense como sería la India si no hubiese estado invadida por grandes potencias sacándole recursos!
En fin, este preámbulo solo para contarles algo de información que puede aclarar que la India no solo es pobreza y que ésta ha venido disminuyendo sustancialmente desde su independencia.
CAÓTICA BELLEZA pues hay algo especial en India y definitivamente es su gente. Estuve viajando por el centro, norte y sur y quiero contarles algunas de las cosas más relevantes para mi vida que logré en muy poco tiempo, desde el amor, percibir en ellos y que fueron enseñanzas profundas atesoradas en mi alma para trascenderlas en el lugar donde esté.
UN PAÍS LLENO DE COLOR. Colores muy vivos como los que me gusta utilizar cuando pinto, llamativos, mezclados, definidos, intensos, pero sin duda hermosos y que me llevaron a un éxtasis difícil de describir con palabras.
Los hermosos “Saris” coloridos, los cuales resaltan su color de piel oscuro, llenos de colores, adornos, una expresión del color de sus almas. Los bolsos coloridos en toda la palabra, cargados de semillas, espejos, colgandejos, en fin, una expresión más de sus más sensibles sentimientos. Por donde mires en India hay color y no cualquiera, hay una hermosa manifestación del color. Me medí en un almacén un Sari y tal vez no me lucía como a ellas, lo que si utilice y sigo utilizando en algunas ocasiones es el “Bindi”: el pequeño punto de color adornado que se coloca en medio del entrecejo y que tiene un significado especial. Bindi significa pequeño punto y se pone para honrar esa sabiduría oculta que se encuentra en nuestro interior y que la representa nuestro sexto chakra.
La comida es llena de colores, los cuales se mezclan en una mesa y hacen del momento una maravillosa experiencia y a veces picante experiencia. En el primer restaurante visitado pedimos algunos platos para compartir y cuando muy emocionados algunos nos metimos el tenedor a la boca, oh sorpresa, picanteeee. Afortunadamente nuestro guía nos pidió “Raita”, una salsa de yogurt, la cual nos ayudó bastante para suavizar el picante. Pues yo y esa salsa fuimos uno a partir de ese momento: estaba presente en cada comida de mi viaje y doy gracias a Dios por ello.
La gente muy alegre, con sonrisas hermosas, así les falten unos cuantos dientes. Con espíritus sencillos y amables, dispuestos a servir, a vivir desde la profundidad de su ser.
Bailan, cantan, gozan. Tuvimos la oportunidad de observar un matrimonio de cerca: de puras metidas dos amigas del viaje y yo estábamos mirando por la ventana y tomando fotos, cuando dos señores que estaban en el matrimonio salieron de la fiesta y se nos acercaron. Yo pensé que nos iban a decir que nos fuéramos, que era un evento privado; y para sorpresa nuestra, lo que nos dijeron fue que nos invitaban a seguir y así entramos a su fiesta. La gente sin ningún miramiento, con todo el amor y amabilidad, nos recibió por algunos minutos en su fiesta. Nos tomamos fotos y realmente pasamos un momento muy agradable.
Gente con un sentido de presencia impresionante. Cuando están orando, en eso están. No importaba si entrábamos 15 personas en su templo, con vestimentas diferentes, algunos sin mucho respeto hablando. Ellos estaban en lo suyo, en su momento presente de oración. No niegan compartir contigo una bendición o una oración. No importa tu creencia, para ellos es válida. Es el país con mayor diversidad de religiones del mundo.
INDIA
UNA EXPERIENCIA DE VIDA GRATIFICANTE, MARAVILLOSA Y QUE ME PERMITIÓ VERME, VER Y SENTIR LA VIDA DE UNA MANERA DIFERENTE.
